Pensando en darle a la vivienda un sentido utilitario, se planteó lo siguiente:
-Existe una división en dos plantas:
- La primera planta consta de la estancia más colectiva, con la intención de convertir esa zona en la más general de la casa, conectada al exterior y al mismo tiempo cubierta, con el fin de poder crear una especie de ágora
- La segunda planta, sin embargo, contiene ya las zonas particulares, donde se realizan las actividades más cotidianas, y por tanto se requiere un uso más privado.
Además de estas dos divisiones, su función también depende de la metodología que Paulo recogió del Movimiento Moderno* y la idea de Le Corbusier: "la vivienda como máquina de habitar". Su distribución se asemeja a la vivienda como suma de habitaciones y elementos singulares: el existenzminimum. En la segunda planta se puede apreciar, ya que la habitación es el elemento de partida, y a partir de ahí se van generando los demás espacios. Hay que añadir también la disposición de estas estancias a la zona interior de la planta, dejando atrás las ventanas, pero con un lucernario en cada una de las habitaciones, con la intención de iluminar de una forma más discreta. Aplicando el mismo concepto, el cuarto de estar, por ejemplo, se pondrá mirando al exterior. La humedad relativa de Sâo Paulo es muy alta durante todo el año, por lo que se necesita el movimiento de aire, que se logra con los huecos practicables en fachadas opuestas, y correctamente orientadas.
(*) Movimiento moderno: conjunto de tendencias surgidas en las primeras décadas del siglo XX, marcando una ruptura con la tradicional configuración de espacios, formas compositivas y estéticas. PINCHA AQUÍ PARA DESCUBRIR MÁS.
No hay comentarios:
Publicar un comentario